domingo, 28 de septiembre de 2014

Tres años de reflexiones.

           Pues sí, ya son tres años plasmando reflexiones; no son cosas de demasiada importancia, aunque algunas veces van “dirigidas” otras al menos, yo así las considero, son verdades como puños. Eso sí, siempre vistas desde mi torpe punto de vista.  Muchas veces me pregunto: ¿por qué escribir sobre determinados temas? ¡Muy sencillo! Si nos paramos a pensar, la vida da para mucho y sobre todo, se viven muchas experiencias.  Si reflejáramos todo lo que vivimos, tanto bueno, como  malo: ¿cuántos libros podríamos escribir? Solo es ponerse a pensar, cómo decía en uno de mis artículos “pensar es gratis”, al menos por ahora; pues cómo va la vida, quizás algún día tengamos que pagar.
             Este aniversario ha sido, el más triste de mi vida. El que haya seguido mis artículos pronto se dará cuenta de mi tremenda aflicción. Es como llevar esa “tristeza” incrustada en el alma de por vida. No, no es fácil de explicar. Ya lo hice anteriormente en varios artículos,  pero no deseo hablar más de ello, sería como avivar más mi dolor. Sé que muchos de vosotros os habéis percatado de mi situación, aunque calláis en silencio, a pesar de saberlo.
             Sin embargo algunos pronto invadieron mi “correo” con palabras de ánimo y de apoyo. Siempre tuve para ellos palabras de agradecimiento. Otros a pesar de saberlo, callaron de forma incomprensible, jamás le guardaré rencor, puesto que siempre trato de exponer el beneficio de la duda, y digo: es posible que no se hayan enterado. ¡Por qué pensar mal!
            La escritura es un poderoso medio tranquilizante e incluso de transformación Es un mecanismo que refleja el alma y el espíritu de uno mismo, revelando en muchos de nosotros aquellas experiencias que hemos vividos y que a través del tiempo se nos han olvidado. O mejor dicho: “quisiéramos olvidar” Para eso están las efemérides, las cuales nos hacen recordar periódicamente si actuamos bien o actuamos mal. Para esa actitud está ese dicho que he repetido varias veces; “siempre tu conciencia te dictará tu deber”.
            Escribir nos permite abrir los sentidos, ponernos en contacto con los sentimientos reprimidos y dejar “volar la pluma” como se suele decir. Una historia escrita, nos permite regresar y repasar algún momento de nuestra vida, que a veces es necesario para llegar a una conclusión determinada o tomar una decisión. Si no nos paramos a pensar o reflexionar podemos tomar actitudes apresuradas que posiblemente no sean correctas. A pesar de mis años, estoy plenamente convencido que el ser humano es una persona en construcción, desgraciadamente no estamos bien terminado; por mucho que vivamos tenemos que seguir aprendiendo por mucho que sepamos, seguiremos cometiendo errores. Esto lo ratifica la demoledora situación de nuestro mundo.
           Solo me queda daros las gracias por el seguimiento de este Blog, en el que jamás pensé que me leyeran en todas las partes del mundo, como Rusia, China, la India, Indonesia, Estados Unidos y sobre todo  nuestros países amigos de habla hispana.
            Y para terminar decir que el acto de escribir es una actividad cotidiana, que puede provocar momentos de inspiración, relajación, placer e incluso de reflexión, como acredita el título de este Blog.

¡¡GRACIAS A TODOS LOS QUE ME SIGUIERON!!

 Meditación: Qué gran libro se podría escribir con lo que se sabe. ¡Pero mucho mayor sería si se  escribiera sobre lo que no se sabe!

 --- --- o o 0 o o --- ---

1 comentario:

  1. Gracias por estos aňos de reflexiones aunque, solo llevo algunos meses “suscrito“ al blog. Gracias por hacer presente la vulnerabilidad aunque cueste. Gracias por ser capaz de seguir adelante, sin entender los porques. Gracias por compartir tanta experiencia. Muchas gracias y adelante, sevillano. Un abrazo.

    ResponderEliminar