¡Verás! No es que
todos queramos amar, es que el ser humano por naturaleza, necesita amar. Las
formas son indiferentes, pero así está establecido. Sería imposible por muy
“dura” que sea una persona, vivir sin sentir afecto por algo o alguien; sería
realmente triste. Existen periodos en nuestra existencia que necesitamos que
nos aprecien, que sientan algo por nosotros. No es nada nuevo lo que digo.
Incluso la persona más solitaria que podamos encontrar, siempre necesitará dar
y recibir amor. (Caso muy frecuente son los indigentes) Raro es, el que no
expresa un extremado cariño con cualquier animal de compañía. Son capaces de
quedarse sin comer, y compartir lo poco que tienen con su mascota.
La pregunta en
estos casos sería: ¿es fácil amar? Es posible que digamos que no, pero pensemos
al mismo tiempo, que es uno de los actos más importantes en nuestra vida. Todo
consiste en la convicción de que uno se sienta aceptado por los demás. Sólo con
eso, ya consigues una paz interior, incapaz de poder describirla, pero esa
simple aceptación ya te hace sentirte seguro de ti mismo y al mismo tiempo
notarte valorado por los demás. El buen amor, es el que se promueve en mayor
medida; es decir, que el otro sea plenamente quien es, y sólo por ello, nos
brinda la mayor satisfacción.
Verdaderamente el
amor es un sentimiento que solo tiene que ver con uno mismo, puesto que así
empieza, luego se propaga hacia los demás, y al final lo aceptas de forma
recíproca, de la misma forma donde se originó, sin saber por qué. El amor es
así, sin embargo, con frecuencia pedimos a quien amamos, que modifique su
manera de ser, que sea más expresivo y, a medida que uno va entrenándose en el
amor, al mismo tiempo que lo sientes, las experiencias van siendo cada vez más
gratificantes y enriquecedoras.
Todos
deseamos amar en libertad, pero no debemos dejar de aprender, en primer lugar,
ser dueño de nuestras vidas y de nuestras emociones, sabiendo gestionar nuestro
estado de ánimo, nuestras palabras y nuestras atenciones para con lo demás. El
buen amor no pretende poseer al ser amado. El amor es uno de los sentimientos
más importante del ser humano. El amor es comprender, servir, dar, querer,
compartir, respetar y convivir. Todos queremos amar profundamente a otra
persona; desnudar nuestro interior ante esa persona; pero muchos no se atreven
a correr el riesgo de entregarse porque siempre hay la posibilidad de ser
rechazado.
Creemos
que “amar” y “desear estar con el otro” son la misma cosa. Pues no. Estamos muy
equivocados. Desgraciadamente en la actualidad el amor en algunas personas, por
lo que estamos viendo es desamor, puesto que el tiempo que dura es muy poco ya
que según ellos “se les acaba el amor” cuando en realidad lo que pasó es que
nunca hubo amor sincero.
Generalmente el
ser humano solo tiene una necesidad: Amar. Cuando se descubre esto, entonces
notaremos que nos transformamos. El amor no es dependencia. El amor no es
compartir nuestra soledad. El amor no es deseo de “lo tengo que conseguir” ya
que de esta forma nos lleva al origen del sufrimiento; pensemos siempre que el
amor perfecto elimina los miedos, consigue estabilidad y nos da seguridad.
Meditación:
Amar es la solución para vencer a la soledad cuando se está sólo.