domingo, 30 de octubre de 2011

La falta de proyecto.

          La falta de proyecto    es un estado emocional de insatisfacción  dentro de una existencia que, durante esos momentos, se percibe como insulsa, vacía, sin sentido, etc.            Con la llegada del aburrimiento se tiene la impresión de que el gozo y las experiencias positivas de la vida han quedado detenidas.
            Debemos aspirar a recuperar ese gozo, esa capacidad de experimentar sensaciones agradables o interesantes; sin embargo, durante el aburrimiento la persona que lo padece no está dispuesta a iniciar actividad alguna que pueda acabar con ese estado, bien porque está disminuida su capacidad de actuación, o bien, porque se cree que ninguna actividad a su alcance puede cambiar su situación.
            Todos nos hemos aburrido en algún momento de nuestra vida, y por tanto, se puede decir que se trata de una experiencia normal dentro del contexto general de la vida humana. La falta de proyectos cara al futuro, no tener una actividad profesional satisfactoria, relaciones humanas pobres y escasas, junto con más factores de todo tipo hacen que favorezcan la aparición del aburrimiento, que puede llegar a hacerse crónico.
            ¿Cómo podemos combatir esta falta de proyecto? El problema suele estar, como dije al principio, en una proposición más o menos seria para comenzar una actividad que rompa con ese peculiar estado emocional.
            Esto se puede solucionar con una buena planificación, que nos asegure una ocupación durante la mayor parte de las horas del día, procurando que éstas sean satisfactorias  y que evite ese “estar cansado de no hacer nada”. Algunos psicólogos coinciden en afirmar que una de las razones que mueven a los jóvenes a entrar en el mundo de la droga y el alcoholismo es precisamente el aburrimiento. Igualmente pasa con los niños: precisamente el aburrimiento es lo que los induce a cometer travesuras (lo que coloquialmente se llama "portarse mal").

Meditación: Las oportunidades son puertas que no se habren solas.

jueves, 27 de octubre de 2011

El desengaño II

               El desengaño en la amistad es una situación personal que ningún ser humano desea tener, no entendiendo por qué sucede, ni por qué  a veces, ni por qué motivo. Es realmente inexplicable. El desengaño es la impresión negativa que todos sentimos al darnos cuenta de que algo que teníamos como ilusión no se hace realidad resultando erróneo o falso. Cuando hablamos de desengaños en la amistad, nos estamos refiriendo al interior mismo del alma, a ese espacio que ha sido violado de una forma u otra.
            Tendemos a idealizar unas palabras, y a apropiarnos sin darnos cuenta de ella. Cuando hacemos esto dejamos de lado nuestras propias formas de actuar, e incluso de pensar para dejar fluir ese sentimiento de comunicación con la otra persona.
            La amistad no es un sueño, es una realidad un estado emocional que crece dentro de nuestra mente y se apodera de nuestra vida a veces lentamente u otras de manera arrolladora. Sea como fuere, cuando este sentimiento es abandonado sin motivos por una de las partes, es cuando aparece la frustración, el dolor, el no saber reordenar la situación, por haber adquirido una forma que no es la nuestra.
            Es difícil empezar desde cero, es el miedo de todo aquello que viviste como amigo, ahora solo pueda depender de la otra persona, al no querer escuchar tus palabras, o no querer reconocer el concepto de amistad..
            Los seres humanos tendemos a idealizar todo o casi todo lo que concierne a las emociones, el hecho de que luego estas idealizaciones vuelvan a buen puerto, es debido solo al tiempo a la recapacitación debido a la falta de madurez de alguna de las parte.
            ¿En qué momento aparece el desengaño? Aunque parezca mentira, quizás todo se realiza desde el principio, al no consolidarse una verdadera estructura de amistad, a pesar de que aparentemente esos primeros contactos llevaban un “sello” de autenticidad.
            ¿Cómo superar ese desengaño? No es nada fácil;  pero la madurez y la formación de una de las parte, hará superar esa situación en la que desde el principio, supo comprender que aquello que se decía no podía ser real.

Meditación: A veces perder un amigo, duele más que perder a un ser querido.-


domingo, 23 de octubre de 2011

Barry Lyndon - Franz Shubert


Excelente vídeo producido por la psicóloga madrileña MontseAntares. En él nos demuestra el buen gusto y conocimiento que posee al producir dichos montajes.
Ya os dije en mi presentación, que a veces mis comentarios irían insertados por algún vídeo de carácter musical.
Barry Lyndon es un largometraje dirigido por Stanley Kubrick, protagonizado por Ryan O'Neal y Marisa Berenson y estrenado en 1975. Está basado en la novela de William Makepeace Thackeray del mismo título. Ganó cuatro premios Óscar, a la mejor dirección artística, a la mejor fotografía, al mejor vestuario y a la mejor música, y fue nominada a tres más, a la mejor película, al mejor director y al mejor guión adaptado.

Meditación: El olvido es la planta que florece a orillas de las tumbas.-

El desengaño I

             Quizás uno de los peores sentimientos que podemos experimentar los seres humanos es el desengaño. El desengaño va más allá de la rabia, más allá del dolor, más allá del odio. El desengaño vuela y camina por encima de todos ellos, porque le acompaña la burla, el desdén y la hipocresía. Pienso que más de una vez hemos sufrido algún desengaño de tipo afectivo, sino lo estamos sufriendo en estos momentos.
            Indudablemente es una experiencia realmente desagradable, por la que todos pasamos a lo largo de nuestra vida, aunque se suele decir que eso nos hace fuerte, pero personalmente no se lo deseo a nadie.
            En definitiva no se puede negar que el desengaño duele, al principio siente como un golpe seco que te deja sin aliento, luego duele en cada milímetro pero ¿es esto negativo? no lo creo, el desengaño es la liberación, es alcanzar un poquito de eso que se ha buscado incasablemente desde tiempos ancestrales, es alcanzar un poquito de aquello sobre lo que tanto disertaban los filósofos; “la verdad”.
            Si dejamos que el desengaño nos paralice, si culpamos a los demás, no vamos a llegar a ninguna parte. En cambio, podemos aprender, a tolerar los desengaños, a aceptar a las gentes en sus propios términos y aceptarnos a nosotros mismos con nuestra carga emocional y nuestra sensibilidad. Si así lo hacemos, las relaciones afectivas tienen el poder de curarnos y ayudarnos a superar nuestras heridas.
            En cierto modo, enfrentar el desengaño, es como despedirse de sueños imposibles. Si nos enfadamos y nos encadenamos en algo inexistente, no podremos tener una clara visión de lo que sí existe.
            Todos vamos a la caza de sueños perdidos y queremos de alguna manera, compensar las frustraciones tempranas, pero no tenemos por qué andar atados a moldes de desengaños, tenemos que hacer la paz con ellos.

Meditación: Admiramos a las personas por motivos, pero las amamos sin motivos.-

jueves, 20 de octubre de 2011

Siempre nos duele algo

             Los médicos creen que no tenemos nada, pero nuestro sufrimiento es real. Somos personas que a veces sentimos dolor en alguna parte pero no sabemos por qué. ¿Qué podemos hacer para recuperar nuestro bienestar?
            Es muy frecuente que el cuerpo humano sufra hipocondría. “La hipocondría es el miedo persistente a que el cuerpo funcione mal” Nuestro cerebro envía señales de alerta a partes del cuerpo donde, en realidad, no ocurre nada. Esto sencillamente es una dolencia causada por la interacción entre cuerpo y mente.
            Un claro ejemplo es el “síndrome del miembro fantasma” que sufren aquellos que, después de perder una extremidad siguen notando dolor en la parte que ya no existe.
            En estos casos sufrimos de emociones reprimidas, siendo esto, cuando nuestros pensamientos generan emociones que afectan a nuestro cuerpo.
            Cuando tratamos de comprender ese dolor existe la tentación de caer en una situación muy simple.”Son los nervios”, decimos, sin embargo para cada individuo la explicación es distinta, presentándose un cuadro clínico, en el cual siempre hay una demanda de atención, hacia los demás. Pedimos a gritos que nos escuchen y comprendan el motivo de nuestro dolor emocional.
            Ante estos casos: ¿qué podemos hacer? En primer lugar debemos controlar nuestros pensamientos. Practicar ejercicios de respiración, visualizar imágenes positivas y aprender a controlar el miedo al sufrimiento. Todo ello son formas de evacuar el estrés y las tensiones emocionales que pueden llegar a provocar dolor.  Debemos pensar que lo físico y lo mental, el cerebro y la mente, están intensamente interconectados, el uno cuida del otro y si uno está bien el otro, también.

Meditación: La felicidad no consiste en llegar a obtener lo que deseamos, sino a disfrutar de lo que tenemos.-

domingo, 16 de octubre de 2011

Hablar solo

           Muchas veces he notado que hay quienes hablan con frecuencia solos. Más bien diría que hablan consigo mismo. Personalmente no lo encuentro nada extraño. Es cierto que a veces nos sorprenden quienes una y otra vez observamos a alguien anunciando en voz alta sus pensamientos, sin aparente necesidad para los demás.
            Estas personas están tan acostumbradas a hacerlo cuando no hay nadie que insisten en su conversación, ante la sorpresa de quienes asisten a su monólogo, quedan sorprendidos al no encontrar un interlocutor.
            Es cierto que pronunciar palabras en solitario, representa una acción que garantiza el compromiso, como si de la proyección garantizara el compromiso de enterarse uno mismo de lo que dice. Otros prefieren tomar notas por escrito, como quien va a cumplir un encargo o a hacer una compra.
            Tal vez en esto consista el pensamiento, en una cierta conversación de uno, consigo mismo. O si no, eso nos constituye como quienes somos. Si lo pensamos bien,  tampoco está mal que en algunas ocasiones nos digamos algo.
            Decir que alguien no nos dice nada, implica que ni nos afecta. Ciertamente a veces nos asustamos, y tenemos que enterarnos por nosotros mismos, realizando el ejercicio de hablarnos en solitario. Realmente es duro aceptar que no somos extraordinarios. Esto no consiste en deslumbrarnos, sino en ser capaz de decir algo a alguien. Y eso es mucho más que hablar. Conversar con uno mismo es empezar a serlo.        Y esta sencillez es la que nos hace capaz de mantener cordialidad, afecto amistad, etc. Si no nos sentimos, no podremos sentir nada. Y lo que es peor, no sentiremos a nadie, por eso esa soledad es más grave que la de ir por ahí hablando solo.

Meditación: Si hay algo que no debe existir en la vida de cualquier persona,  es un día sin importancia.-

jueves, 13 de octubre de 2011

¿Buscamos la calma interior?


            Perdidos entre los problemas del exterior y nuestros conflictos interiores, a menudo nos cuesta saber lo que queremos.        Aprender a encontrar la calma interior no es nada fácil. Debemos valorar y utilizar todos los recursos para impedir encontrar esa paz interior. Para decirlo de una forma simple, cuanto más calmados y serenos estemos, muchos menos errores cometeremos, siendo nuestras decisiones más efectivas.
            Pero, ¿cómo lograr dejar de lado todas la preocupaciones del día a día, superar el mal humor por las discusiones, ese runrún mental de “debería hacer”, o “tengo que”, para conectar con nosotros mismo y preguntarnos qué es lo que realmente queremos?
            Es muy importante a la hora de elegir, escuchar solo los comentarios de aquellos que crees que tienen opiniones bien fundamentadas; no escucharlos todo porque sí. También es de vital importancia, conocerte a ti mismo y saber lo que quieres. Esto es algo que se va adquiriendo con los años y no cabe duda, de a través de muchas equivocaciones.
            De hecho, son los fracasos los que nos llevan a reflexionar y a aprender. Imagino que a medida que pasan los años cada vez sabremos mejor lo que nos conviene. El error mayor es no pararse a pensar en uno mismo y en “el qué dirán”, para no dejarse llevar por los problemas del exterior.
            De esta manera y aprendiendo a observar nuestros pensamientos, sin atraerlos ni evitarlos, nos permitirán encontrarnos con nuestra calma interior.

Meditación: El amor es como la cerámica, cuando se rompe, aunque se reconstruya, se le ven las cicatrices.-

domingo, 9 de octubre de 2011

¿Somos todos ciberadictos?


      ¿Somos conscientes de nuestro grado de dependencia con el Ordenador o el móvil? Es preocupante pensar que nuestra ciberdependencia podría convertirse en  una enfermedad e incluso una adicción patológica. Consultar los e-mails en el fin de semana, cuando en verdad, no hay ninguna urgencia, contestar enseguida un texto que hemos recibido apenas unos segundos antes, sentir pánico porque has olvidado el cargador y donde vas no hay, ni tampoco cobertura, o también consultar páginas de Facebook de tus amigos varias veces al día. Nuestra adicción con los aparatos informáticos deriva en la compulsión, obsesión, y huída de lo real , en definitiva esa adicción nos compromete cada día más.
          La ciberdependencia sigue punto por punto los mismos criterios de la toxicomanía. A veces se da el caso como una droga dura, es en definitiva la imposibilidad de resistirse al impulso de esa sensación creciente de estar sometido a una tensión, antes de ceder ante él.
          Hay personas que su dependencia llega  hasta el extremo de estar inscrito; en Facebook, Twitter, Netlog, SoulSeek, YouTube, Messenger, etc. etc. Es sorprendente, pero comúnmente aceptamos que hay gentes que se comunican diariamente entre esas "redes", a pesar de que suele ser con las mismas personas; otro de los inconvenientes son las contradiciones que a veces se suelen cometer al estar sometido a diferentes depedencias. A pesar de todo lo anteriormente expuesto, diariamente estamos sometidos al continuo "bombardeo" de correos electrónicos, a los cuales siempre, y cuanto antes queremos responder.
        Y por si fuera poco, aún nos quedan los Blog's,  los cuales nos comprometemos a mantenerlos y tenerlos al día, añadiéndoles también los consabidos comentarios a los cuales debemos responder por atención al que se ha dignado contestar.
      ¿Acaso somos todos unos ciberenganchados en potencia? Hombres, mujeres y adolescentes, cada uno de nosotros, con sus deseos particulares, podemos caer en "trampas" diferentes: como compras compulsivas, amistades que no son reales, contradiciones en los datos que reflejamos, juegos, pornografía, etc. etc.
       Por definición podríamos decir: "Todas las dependencias aportan cierta respuesta a las dificultades que diariamente nos sometemos".Así que, aparentemente, aunque la adicción nos la creemos solucionada, en realidad la verdadera causa permanece intacta, siendo entonces cuando la solución se convierte en un auténtico problema.

Meditación: Nuestro carácter es el resultado de nuestra conducta.-

jueves, 6 de octubre de 2011

El cariño a mi mascota

              Es cierto que cuando llegamos a casa, el primero que viene a darnos la bienvenida es nuestro perro. Las relaciones con los animales domésticos están llenos de sentido y cariño.
            No olvidemos que nuestras mascotas tienen un nombre, ya sea para compartir nuestra vida con un animal o llenar una carencia afectiva. No es de extrañar que, cuando una mascota muere, su dueño sufre un doloroso duelo. Tener un animal de compañía implica mayor calidad en la vida de las personas. El ser humano recibe mucho de su animal de compañía, y éste apenas pide nada. El perro es el animal de compañía que mejor comprende las emociones de un ser humano. El calor corporal de este “amigo del  hombre” permite que nuestro organismo segregue unas sustancias en nuestro cuerpo de bienestar.
            Con la decisión de tener una mascota ocurre lo mismo que con la decisión de empezar una relación de pareja: no siempre el motivo es el amor. Muchas personas tienen una mascota porque les encanta y son conscientes de lo que ésta necesita. En este caso, personas y animales disfrutan de una relación saludable.
            Asimismo, hay quien adquiere un animal porque le gusta y, de paso le ayuda a paliar su soledad. Si es cierto que, la relación entre personas y mascotas parece tener algunas ventajas con respecto a la relación entre seres humanos  Una mascota nunca criticará a su dueño y siempre estará a su lado.
            En cambio, algunos confunden el verdadero deseo de convivir con un animal con un capricho. Hay dueños que no son conscientes de los cuidados y gastos que implica tener un animal.  El problema es que muchas personas no ven a los animales domésticos como seres que tienen sus derechos.
            Un perro puede conseguir que una pareja salga a pasear y realice actividades de forma conjunta. Debemos reconocer que uno de los grandes placeres de quien tiene un perro es salir a pasear. “Contemplar a un ser que está vivo, que es bonito y además es cariñoso,  realmente es algo maravilloso”.

Meditación: Las mejores cartas de amor las escriben los que nos están enamorados.-

domingo, 2 de octubre de 2011

Pensar en las flores

             Cuando  pienso en las flores, mi primer recuerdo es en la muerte. Pero,  ¿por qué no en el amor?   No lo sé.  Quizás sea en la vida.  No, no es que no me acuerde, es que no lo sé, aunque tal vez dé lo mismo, o sea es posible que sea lo de menos. He visto tantas, y en ocasiones tan dispares, que dudo que pensar. A lo mejor su atractivo está en nuestra existencia.
            Las he sentido, no solo es cosa del olfato, sino mucho más. Es tal su diversidad y su complejidad que desconfío de quienes tienen demasiado claro la flor que hace falta en cada ocasión.
            Una misma rosa puede ser una rosa de amor, una rosa de vida, o una rosa de muerte. Es que las flores se relacionan y dialogan entre sí, y tienen mejores o peores “conversaciones”. Dicen más o menos, una u otra cosa según su posición, su combinación su distribución, etc.
            Y no sólo por un asunto de color. Algo las enlaza o desvincula que no se puede reducir sólo a asuntos de aspecto y de color. Me impresiona ver una flor totalmente sola, por muy bella que sea me produce tristeza. Parece como si estuviera esperando una ocasión para poderse manifestar. Por eso, en ocasiones, la palabra no se manifiesta solo con el sentido propio de dicha palabra, es como si las flores con todo su esplendor, anunciaran lo que en nuestro interior manifestamos. No sé si al hablar de esa flor de amor, de vida o de muerte, estoy hablando de mí, de nosotros, de lo que al final acabará marchitándose, de lo que su hermosura anuncia una despedida, pero ello no le arrebata su verdadera belleza. Confirmándonos  de esta forma, hasta que punto su aspecto es tan deslumbrante como el vivir.

Meditación: A veces un bello paisaje, es un poema sin palabras.-