La discreción.

            Siempre todo bajo mi modesto criterio, -es posible que me equivoque, (pero no soy de “letras”). ¡¡Perdónenme!! La discreción es un sentimiento de respeto, credibilidad y confianza que provocamos en las personas a las cuales estamos ligados de alguna manera.

            Un acto de discreción, si esa persona no está preparada moralmente, puede romper una relación de amistad de muchos años. Una  amistad no es una obligatoriedad familiar, es una elección personal.

            La discreción es aquella virtud, que consiste en cultivar la sensatez, el tacto en el hablar, la prudencia y la elegancia.

            Por ello el hecho de tener discreción es cultivar una tabla de valores éticos y morales, para hablar, actuar y emitir opiniones.

            Entonces debo plantearme que donde están la prudencia, la sensatez y la elegancia; se encuentran  las mejores cualidades que van unidas a la discreción.

            Para ser discreto no hace falta que nos pidan que guardemos secretos sobre un asunto, basta con tener sentido común y saber qué es lo que nos dicta nuestra conciencia y con qué persona conversamos, puesto que su vida privada en alguna ocasión y durante mucho tiempo pudo estar “abierta” al público.           Basta con tener sentido común y comprender que esa vida sólo pertenece a sus sentimientos personales.

            Pero a pesar de todo, es cierto que el discreto debería comprender que no todos lo pueden entender, ni todo se debería decir, a pesar de causarle un perjuicio.  Puesto que a veces  se intuye lo que hay detrás de los gestos y de las cosas que no se dicen.      

            La persona discreta es un tesoro. Es siempre un amigo potencial. Es como un profesional admirado y solicitado. Es alguien respetado, respetuoso y respetable.   

            Esto, no cabe duda que a veces por actuar con corrección te cuesta el rechazo y el desprecio. Es estos casos deberíamos callar algunas advertencias incómodas o algunos comentarios que en determinadas circunstancias, existen personas que nunca llegarían a comprender lo que la discreción representa.

Meditación: Si no quieres que sepan tus sentimientos, no lo expongas al público.