miércoles, 20 de enero de 2016

Ante las adversidades.

             Es posible que me digáis, que ante las adversidades, debemos sobreponernos. Pero os preguntaría; ¿cómo se puede aumentar la capacidad de superar esos periodos de dolor emocional? Ante una adversidad, las personas actúan de forma muy distintas a como somos. No todos somos iguales. Después de sufrir una experiencia traumática, influye en nuestro interior un cambio difícil de explicar.
             Es necesario nacer con una cierta dosis de “capacidad humana para asumir con flexibilidad, situaciones que no tengan límites” Aunque también existen personas capaces de enfrentarse a las angustias inevitables de una primera reacción, orientándose rápidamente a la nueva realidad y adaptándose a esos nuevos retos presentes. Son personas que a menudo entran en una espiral positiva de la que acaban saliendo a veces más fortalecidas, e incluso mejor que antes.
              Nunca entendí cómo conseguirlo. Aunque comprendo que aquellas capacidades negativas que se presentan ante nuestras vidas, especialmente en nuestro pasado, suelen tener connotaciones  que nos traumatizan de “por vida”. La vida nunca ha sido un camino de rosas. Creo que esto ya lo he dicho antes. Por eso las adversidades forman parte de la experiencia de estar vivo, pero es necesario tolerar ese “dolor” que nos consume, aceptándolo e incluso vivir con él. Es cierto, vivir de esa manera implica cambios y los cambios casi siempre traen conflictos. Deberíamos reconocer que es necesario asumir con realismo, para poder manejar de forma eficaz los cambios y los conflictos que esas adversidades nos puedan ocasionar.
              Muchos a veces nos identificamos con un conflicto, lo magnificamos y lo convertimos en el epicentro de nuestra vida. Todo ello nos llevará a un error, debido a que lo estamos gestionando mal, llegando a consumir todas nuestras energías. Muchos de nuestros problemas surgen cuando la discrepancia entra en “lo que es” y “lo que debería ser”. No es fácil de comprender, pero todo ello nos exige determinadas respuestas para que de alguna manera podamos eliminar esas adversidades.
              Sé que me diréis que siempre acudo a la reflexión y sobre todo a la meditación, pero desde la serenidad que esto representa es posible que veamos las cosas con más claridad, y así tener la seguridad de aceptarlas y tomarlas con las decisiones más adecuadas sin dejarnos arrastrar por las emociones. En cualquier momento se nos puede presentar una situación adversa, que puede que la veamos como una interrupción de nuestra trayectoria vital, pero todo consiste en la posibilidad de aceptarla para poder seguir avanzando.
             Cuando expresamos los sentimientos ya sea hablando o escribiendo, lo que estamos haciendo es liberar esas adversidades. Pero prestemos la debida atención a que esas experiencias “dolorosas” en realidad no encierren un sentido que, más tarde pueda hacernos reaccionar de forma que nos perjudiquen y nos atormenten. Por eso, cuando nuestras emociones sean demasiado negativas, podemos emplear la escritura como medio para expresarlas, librándonos de ellas sin tener repercusiones exteriores, y sobre todo evitando las posibles adversidades que puedan ocasionarnos.
             Cada día veremos que nos irá fortaleciendo. Y aunque siempre se nos presenten dificultades y adversidades, el sólo hecho de irlas superando nos ayudarán a avanzar con más seguridad y confianza.


Meditación: Ser una pareja perfecta no significa no tener problemas, sino saber superarlos juntos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario